María Laura Machado
Bogotá
27/03/2014
Foto: Daniel Machado
El reconocido actor
venezolano Guillermo García, nos abre las puertas de su departamento ubicado en
la ciudad de Bogotá Colombia, lugar donde reside y trabaja actualmente. En un
ambiente íntimo y cordial. García nos comenta como fueron sus inicios en los
medios de comunicación venezolanos y su carrera como actor, ya que a pesar de
haber experimentado varias facetas como locutor y comunicador social, el afirma
lo que más le gusta hacer es actuar: “Estudie periodismo para regalarle un título
universitario a mi mamá, pero estudiando la carrera, comenzó mi interés por la actuación,
además me interesó mucho la producción,
sobre todo la de cine”. Luego de haber ganado el Premio Goya a la mejor película
iberoamericana con Azul y no tan Rosa ¿Existe una meta más grande para
Guillermo García? “Siempre estoy en búsqueda de algo más. De hecho, ganar el
Goya fue algo inesperado ya que competíamos con las mejores. Actualmente, me
encuentro trabajando en la serie de televisión No Sos Vos, Soy Yo, y me siento
contento porque esta producción es una de mis favoritas”. El actor comenta que
no es la primera vez que ha trabajado en los
medio de comunicación colombianos: “He trabajado aquí en varias
ocasiones, pero no en todas me ha ido bien. Una vez hasta tuve que dormir en un
colchón que estaba justo al lado de la nevera en la casa de una amiga y me he quedado sin un solo céntimo, entonces sucedió que cuando me regresaba a
Venezuela, me llamaban para algún trabajo importante. Pero esta vez, decidí
arriesgarme de nuevo y me ha ido muy bien”. Actualmente posees una relación
sentimental con la también actriz Juliett Pardau, ¿Alguna vez existió algún
tipo de competencia profesional entre ambos? “Para nada, siempre tratamos de
dejar el trabajo en el trabajo, aunque si podemos ayudarnos de alguna manera
uno al otro, lo hacemos.” Guillermo ha participado como protagonista en las últimas
producciones de cine venezolano más importantes en la actualidad, de las cuales
destacan La Casa del Fin de los Tiempos
y Azul y no tan Rosa, pero a pesar del éxito de ambas, expresa que existieron
diferencias en la realización de cada
una de ellas “Hubo mucha diferencia ya
que la visión de los directores era distinta. Por ejemplo cuando trabaje con
Miguel Ferrari, el es una persona de mucha experiencia y solo con explicarme el
guión, ya tenía visualizada la película. Al contrario de Alejandro Hidalgo, él nos orientaba y
aunque a veces no entendíamos, al final todo quedaba como se lo imaginó”.
¿Volverás a Venezuela? “Sí,
quiero seguir haciendo cine en mi país. Debido a que es un medio que ha ido
creciendo mucho. Hoy en día, la gente prefiere ir primero a ver una película
venezolana a una extranjera. Es por ello que La Casa Del Fin De Los Tiempos se
convirtió en la película de terror más vista en Venezuela“.